La Sociedad de Santiago de Calatrava (Jaén) donan más de 250 conejos a las Hermanitas de los Pobres

La Sociedad de Cazadores “Las Cuestas” de Santiago de Calatrava (Jaén) ha puesto en marcha una campaña solidaria en la que más de 250 conejos y 30 palomas cazadas en los acotados de esta sociedad han sido donados a las Hermanitas de los Pobres para alimentar al centenar de personas a los que atiende esta institución en Jaén.

“Pensamos que con las piezas que cazamos podríamos contribuir a alguna obra benéfica y a ayudar a la economía doméstica de quienes menos tienen; se lo comentamos al delegado provincial de la Federación Andaluza de Caza en Jaén, Mariano Pastor, quien nos animó” explica Antonio Gutiérrez, presidente de la Sociedad “Las Cuestas”. 

Dicho y hecho. Tras una intensa y calurosa jornada de caza, el delegado provincial de la FAC en Jaén entregaba el pasado 15 de agosto a las monjas de las Hermanitas de los Pobres los 118 conejos cazados por los socios santiagueños en sus acotados. Apenas cuatro días más tarde, de nuevo el delegado jiennense de la FAC entregaba a las Hermanitas de los Pobres los 133 conejos y 30 palomas cazadas por la sociedad en la jornada del pasado domingo, sumando así en total más de 250 ejemplares que contribuirán a paliar las necesidades de las 100 personas atendidas en la residencia de esta institución en Jaén.
La repercusión social y la buena acogida de esta iniciativa por parte de los colectivos de desarrollo social han provocado que la Sociedad “Las Cuestas” ponga ya en su punto de mira la solidaridad con otros colectivos e instituciones necesitadas. No en vano, las piezas cazadas en la próxima jornada dominical serán destinadas a Cáritas Diocesana de Jaén. “No se trata de un hecho puntual: seguiremos buscando instituciones y centros en los que la necesidad apremie y que puedan requerir nuestra humilde colaboración” apunta el presidente del colectivo cinegético santiagueño.
Una vez más los cazadores federados, en este caso de Jaén, vuelven a mostrar el lado más humano y solidario la caza que, más allá del prisma negativo con que en numerosas ocasiones es observada desde el exterior, se configura como una actividad generadora de riqueza no sólo económica, sino también social. 
Lejos de las grandes cifras, como los 200 millones de euros generados por la actividad cinegética en la provincia el pasado año, y lejos de las frivolidades animalistas de ciertos colectivos, este grupo de cazadores de Santiago de Calatrava ha demostrado que la caza, al menos la social, no está reñida con el desarrollo de una sociedad más justa e igualitaria.


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